¿Recuerda cuando te introducimos a las estrategias de marketing directo? Pues llegó la hora de ponerlo en práctica y entender las mejores prácticas para desarrollar campañas que cumplen objetivos específicos. De hecho, más allá de crear experiencias para darles razones a tus clientes de visitar tu restaurante, deberías también saber cómo posicionar estos eventos para llamar la atención de tu mercado objetivo y llamarlo a la acción.
Pues eso es el objetivo de hoy, enseñarte a crear estrategias de marketing directo de manera organizada y darte la oportunidad de invertir tu presupuesto de marketing de manera eficiente. Aprenderás la importancia de considerar estas estrategias como unos hábitos que podrás mejorar a lo largo de tus aprendizajes y encontrar maneras de optimizar tu retorno en inversión para gozar de un crecimiento sostenible.
Familiarízate con el marketing directo.
Antes de compartirte nuestra recomendaciones, consideramos importante recordarte de que trata el marketing directo. Principalmente puedes definirlo como al acto de apuntar a un objetivo claro, creando una estrategia medible que va dirigida a un público específico.
Al contrario del marketing de marca, el marketing directo promueve tus productos y servicios directamente a las personas que más los necesitan de manera estratégica y medible. Estas campañas son reconocidas por segmentar y apuntar a un público específico y así aumentar la probabilidad de que las personas adecuadas vean realmente tus productos. Estas acciones pueden tener un objetivo de venta o simplemente hacer que más personas conozcan a tu marca.
Por un lado, uno de los principales objetivos de una campaña de marketing directo es generar ventas y clientes potenciales. Para eso las campañas deben ser diseñadas de manera muy personalizada y tratar a cada cliente como un individuo en lugar de un marketing masivo como el radio o la televisión.
Otro objetivo principal del marketing directo es crear conciencia y así ganar la atención de clientes potenciales. Aunque estas campañas no se convierten inmediatamente en una transacción, pueden conducir a una venta futura cuando el cliente tiene una mayor necesidad de adquirir productos o servicios.
Sea para generar ventas o conseguir clientes potenciales, lo más importante de una campaña de marketing directo es que los resultados se puedan medir. Es por esta razón que estas acciones deben tener un objetivo preciso y un resultado medible, como la venta de un producto específico o la adquisición de potenciales clientes o nuevos seguidores. Definir objetivos precisos y luego medir los resultados te ayudará a pulir la eficiencia de cada campaña y así mejorar el retorno en inversión.
Debes también tener en cuenta que la eficiencia de estas estrategias depende del nivel de confianza que hayas establecido con tu audiencia. Es decir que la medida en la que tu marketing directo funcione depende de que tan bueno es tu marketing de marca.
Y es por esta razón que Seth Godin, recomienda a los negocios de dedicarse a hacer marketing de marca en redes sociales y recurrir al marketing directo siempre y cuando sea necesario. Según él, un negocio debería dedicarse a comunicar sus valores y su narrativa de marca en medios digitales para mejorar la percepción que las personas tienen de su negocio y luego acompañarlo ocasionalmente de campañas de marketing directo para generar ventas. Hacer bien uso de ambos marketing te ayudará a facilitar el proceso de decisión de compra y por lo tanto aumentar tus ventas. Punto que veremos en el siguiente punto.
3 pasos para crear una estrategia de marketing directo.
Dicho lo anterior, podemos empezar a desarrollar el tema alrededor de esta definición y ayudarte a entender cómo aplicarlo. Para eso divideremos al creación de tus estrategias de marketing directo entre 3 puntos principales.
- Apuntar a un objetivo claro: este objetivo puede ser posicionar tu marca; aumentar tu comunidad; mejorar tus interacciones; generar una base de datos; adquirir nuevos clientes u optimizar tu tasa de recompra. Cada uno de estos objetivos dependen de la situación de tu negocio y de los objetivos que deseas lograr. Eso sugiere que debes no solamente conocer a tu negocio y familiarizarte con sus ventas sino también ser fiel a tu proyección para lograr tus metas de largo plazo. En otras palabras, tus objetivos deberían ir en pro de tu visión.
- Crear una estrategia medible: al identificar el objetivo, puedes empezar a definir la mejor manera de lograrlo y diseñar una campaña que cumple con esta meta. Esta estrategia debería venir acompañada de un presupuesto que puedes considerar como la gasolina que necesitaras para llegar hasta tu objetivo. Adicionalmente, al presupuestar tu estrategia debes también de definir los resultados que deseas obtener. Cabe subrayar que definir específicamente el resultado es casi imposible, pero definir una meta clara y medible te permitirá tomar acción y ajustar si necesario. Puedes por ejemplo definir lo mínimo que deseas obtener con tu presupuesto. Te recomendamos también que esta estrategia se extienda sobre una duración de mediano o largo plazo ya que deberías optimizarla a medida que obtengas resultados.
- Un público objetivo: finalmente, si estableces diferentes objetivos, deberías también tener diferentes públicos. Aunque este público debería compartir el mismo perfil demográfico y psicográfico que tu buyer persona, puedes segmentarlo de distintas maneras según la meta que deseas lograr. Por ejemplo, puedes apuntar a tu propia comunidad; apuntar a personas que no siguen todavía a tu marca en redes sociales o a clientes frecuentes. Aunque los segmentos comparten las mismas características demográficas y psicográficas, cada uno tiene un valor diferente para tu negocio. Y es precisamente lo que debes de cuidar con tu marketing.
Convierta tus estrategias en hábitos.
Al cumplir con cada los pasos anteriores podrás crear estrategias que serán medibles y que podrás optimizar para siempre ir en pro de tus objetivos. Es de hecho una manera de acelerar tu crecimiento y encontrar como llegar a más personas. La buena noticia es que estas estrategias no tienen que ser necesariamente complicadas ni muy grandes. Puedes de hecho combinarlas mensualmente y tener estrategias de reconocimiento de marca, adquisición de nuevos clientes, fidelización y recompra al mismo tiempo. Para eso puedes definir un presupuesto y dividirlo entre cada objetivo según su importancia y tus necesidades. Y es por esta razón que te invitamos a considerar tus estrategias como si fueran unos hábitos y estandarizarlos.
Puedes crear una serie de estrategias que buscan cumplir con los siguientes objetivos:
Objetivo 1: Hacer que más personas conozcan el restaurante en Instagram
- Estrategia: Invertir en los 3 mejores post del mes pasado para alcanzar a más personas.
- Resultado deseado: Obtener mínimo 400 nuevos seguidores por mes.
- Presupuesto: $300,000 / mes
- Público: Personas que no siguen todavía a la cuenta Instagram, que se encuentran en la misma ciudad y que cumplen con las características del buyer persona.
Objetivo 2: Establecer confianza con la comunidad
- Estrategia: Invertir en un influenciador y/o foodie por semana que visita el restaurante y recomienda la experiencia.
- Resultado deseado: Obtener 4 testimonios de calidad que vienen acompañados de una buena fotografía y que se publica también en el perfil del restaurante.
- Presupuesto: Máximo $200,000 / mes o canje de comida.
- Público: Asegurarse de que el influenciador y su comunidad sean similares al buyer persona.
Objetivo 3: Facilitar la adquisición de nuevos clientes
- Estrategia: Crear mensualmente un producto promotor para 2 personas que agrega valor (que no sea un descuento) y que no se comunica en las historias ni la parrilla de la cuenta. La rentabilidad del producto promotor debe de alcanzar mínimo $20,000. Se posicionará vía una pauta de tráfico que dirige hacia el WhatsApp para tomar la reserva y poder medir el retorno en inversión.
- Resultado deseado: Obtener mínimo 25 reservas.
- Presupuesto: $300,000 / mes.
- Público: Apuntar a todas las personas que han interactuado con los anuncios del objetivo 1.
Objetivo 4: Aumentar la tasa de recompra y fidelizar los clientes actuales
- Estrategia: Crear un producto innovador por mes (una edición limitada) que encaje con los gustos del mercado pero que tiene un grado de creatividad. La creación puede ser propia o en colaboración con un chef y debe tener un valor de $30,000. Comunicarla en redes sociales, por pauta y con impresos.
- Resultado deseado: Vender mínimo 100 unidades en 30 días.
- Presupuesto: $500,000 / mes ($200,000 para materiales impresos y $300,000 para las pautas).
- Público: Apuntar a todas las personas que han interactuado con la cuenta Instagram y que se viven a 4 km alrededor del local. Motivar también los comensales que visitan el local a probarlo.
Como te puedes dar cuenta, cada una de estas estrategias cumplen con un objetivo especifico y tienen la capacidad de ser medidas. Al estandarizarla podrás entonces medir su rendimiento y encontrar maneras de mejorarla mes a mes. Es una manera más práctica de obtener ventas y de invertir en marketing.
Así que te invitamos a regalarte un tiempo, analizar tu negocio, definir tus necesidades u objetivos y desarrollar tus estrategias de marketing directo para cumplir con tus metas.